El consumo es una pieza determinante de un sistema económico insostenible, social, y ambientalmente. Es necesario iniciar una transición hacia un modelo de consumo responsable y transformador que tenga en cuenta el gasto energético en la producción y transporte de los productos y las condiciones de precariedad de los productores primarios indefensos ante el mercado global.
Es necesario diseñar un plan de apoyo al comercio local (campañas de sensibilización, fiscalidad, moneda social,...)
Es necesario fomentar los mercados periódicos de productos ecológicos la relación directa entre los/as productores locales y los/as consumidores/as.
Es necesario apoyar los grupos de consumo, cesión de espacios públicos para su uso por grupos y cooperativas de consumidores/as sin ánimo de lucro.
Es necesario apoyar la creación de un envase reutilizable para su uso en los eventos festivos, minimizando así el volumen de residuos en fiestas.
Es necesario fomentar y apoyar la creación en terreno público de huertos vecinales y comunales urbanos.
Es necesario apoyar e impulsar la creación de huertos escolares y hacemos una apuesta decidida por alternativas más justas, que repartan la riqueza, cuiden nuestro entorno y nuestra salud, y favorezcan al comercio y la economía local, originando un menor gasto de nuestros recursos naturales y una menor contaminación.